Un niño
Un hombre dijo a un niño: - Dime niño, ¿por qué lloras?, el niño alzó su mirada y sin decir nada tomó sus cosas y se marchó. Pasó un día y otro y otro más y el hombre volvió a encontrar al niño. Nuevamente le preguntó: ¿Niño, por qué lloras?- Esta vez el niño respondió:
Si me dan armas en vez de pan,
si al buscar a mi madre solo me encuentro,
si en las calles solo hay desamor,
si en mi casa no hay quien habite
dígame buen hombre...
¿por qué no debo llorar?
El hombre bajó la mirada y unas lágrimas recorrieron sus mejillas. Entonces preguntó sollozante, ¿Por qué te has quedado solo?- El niño lo miró y sus bellos ojos negros parecieron penetrar en la mirada del hombre, como uniendo sus vidas en ese instante. Así, el niño tomó la mano del hombre y le dijo:
Dime, por qué los pájaros sí sonríen
por qué los ricos no se quejan
dime, por qué tantos hermanos en las calles
por qué mil historias se cruzan y no se dicen nada
dime, por qué tantos niños en el mundo,
como yo, buscan un hogar.
Le reclamo a mi Señor
por qué me abandona a mí
y a los pájaros da alimento.
Lo llamo en cada amanecer
pues ¿a quién saludar por las mañanas?
pero, lo llamo y no responde
pido, pido y pido...
Entonces cuando salgo a las calles
veo a mis hermanos y gritamos
pero nadie escucha
el mundo se ha quedado sordo
porque solo grita pidiendo
y a los niños ya no nos escuchan
porque están ocupados.
Es entonces cuando nos damos cuenta
que los niños de la calle somos parte de ustedes
porque al igual gritamos, pedimos y lloramos
y nadie nos mira pero sí nos juzgan
nadie sabe nuestra historia
pero sí nos llaman pobrecitos
todos miran nuestras ropas
y se cubren las carteras
cuando nosotros solo les pedimos
un poquito de amor
El hombre se quedó callado, ahora era él quien quería gritar y llorar por el niño; pero, no lo hizo. Miró a su alrededor y solo le dijo al niño... "Ve con Dios" a lo que el niño respondió...Pues bien, lo seguiré llamando, por eso te pido que no grites tan fuerte, a ver si bajando un poco tu voz llega la mía hasta el cielo, ahí donde están mis sueños y donde me esperan mi madre y mi padre.
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